Información de la actuación

Descripción de la acción

El ayuntamiento de Ribera de Arriba ha establecido una estrategia centrada en la gobernanza local con el propósito de fomentar una gestión abierta y en red que invite a la participación ciudadana. Esta estrategia se basa en la creación de redes de colaboración entre los distintos actores sociales y la administración, con un enfoque transversal para el desarrollo de políticas públicas ofreciendo un amplio catálogo de servicios culturales y sociales basadas en el principio fundamental de la accesibilidad universal, que está presente en todas las tomas de decisión.

El trabajo en red es el núcleo de esta estrategia que nace con el objetivo de dar una respuesta coordinada que permita identificar y movilizar los recursos naturales, culturales y humanos ya existentes. Destaca de esta estrategia garantizar la participación ciudadana, el fomento de capacidades y el desarrollo de vínculos comunitarios, impulsando que las personas sean los protagonistas de su propio proceso y de la toma de decisiones que afectan a su comunidad, junto con, la comunicación clara y directa entre la administración y la ciudadanía. Para ello el ayuntamiento dispone de varios canales de difusión de la información entre los que se destaca como medio propio el boletín mensual Sociored, que recopila las actividades que tanto las asociaciones del concejo como los propios servicios municipales organizan, la utilización del servicio Avísame, las redes sociales y otros medios tradicionales como cartelería y un número de teléfono a disposición de los vecinos.

Desde el Ayuntamiento hay una sensibilidad especial por procurar que la intervención social esté respaldada por la evidencia científica, en este sentido, el Ayuntamiento colabora activamente con entidades privadas y universidades para realizar mediciones y encontrar soluciones innovadoras que se ajusten a las necesidades locales.

Resultados y continuidad

Este tipo de gobernanza local consiguen generar nuevos modelos en el medio rural que promueven una gestión participativa, efectiva y sostenible, que aprovecha los recursos locales y fomenta la innovación en beneficio de la comunidad. El éxito de este modelo reside en el empeño de las personas responsables del gobierno, los y las profesionales que median entre la administración y la ciudadanía y la propia colaboración de los vecinos y vecinas.